Hoy hablaré de temas controversiales: De la historia de la inteligencia y cómo se mide y las inteligencias múltiples.
La inteligencia es un tema muy debatido desde hace más de cien años.
La definición actual que uno encuentra en el diccionario de la Asociación Estadounidense de Psicología de Inteligencia es: La capacidad de obtener información, aprender de la experiencia, adaptarse al entorno, comprender y utilizar correctamente el pensamiento y la razón.
A inicios del siglo XX el psicólogo británico Charles Spearman sugirió que los humanos tenemos una inteligencia general que engloba todas nuestras habilidades mentales, a esto se le llamó factor G. Para la visión de Spearman las variadas habilidades cotidianas que mostraba la gente eran expresiones de este factor y que correlacionaría con la evaluación de todos los comportamientos inteligentes humanos.
L.L. Thurstone fue un pionero de la psicometría y de hecho no estaba de acuerdo con la postura de Spearman. Thurstone hizo una batería de 56 evaluaciones diferentes, con las cuales agrupaba 7 habilidades mentales distintas:
Memoria, razonamiento inductivo, habilidad numérica, velocidad procedimental, fluidez verbal, comprensión verbal, habilidad espacial. El detalle fue que finalmente resultó que los resultados de las evaluaciones sí tendían a correlacionar. Si a una persona le iba bien en habilidad espacial, le iba bien en habilidad numérica, por ejemplo… con lo cual sus experimentos terminaron de hecho apoyando la idea de Spearman. Muchos investigadores han revisado este tema, y la correlación entre distintas habilidades mentales, persiste… pero prosigamos con la historia.
En 1882 los franceses pasaron una ley que buscaba equidad, dicha ley promovía que cualquier niño saludable debía ir a la escuela para aprender lo básico: leer, escribir, aritmética, historia, ciencias naturales, etc. Inclusive tenía un apartado relativo a niños con discapacidades visuales y auditivas.
El punto era que en términos generales les preocupaba si todos los niños podrían llevar el mismo ritmo de aprendizaje. Así que Alfred Binet y otros psicólogos fueron comisionados para crear una evaluación estandarizada para medir cómo distintos niños podrían manejar el trabajo escolar.
Junto con Théodore-Simon, se creó la evaluación Binet-Simon en la que los niños responderían una serie de preguntas hasta que ya no pudieran responder y a partir de la evaluación obtenida los niños serían agrupados con otros niños con evaluaciones cercanas en lugar de separarlos por edad o por algún otro juicio subjetivo docente.
Las primeras versiones de estos exámenes buscaban evaluar el desempeño con respecto a la edad cronológica.
Definición del coeficiente intelectual
Entonces por ejemplo, un niño de 6 años que obtenía un puntaje en el rango de un niño de 6 años quería decir que tenía una edad mental de 6 años.
La idea de Binet era que sus evaluaciones servirían para medir las habilidades actuales de un niño pensando en que éstas podían ser mejoradas con auto disciplina y práctica. Su intención era que la educación mejoraría al utilizar como herramienta sus evaluaciones para identificar a los niños que requirieran apoyo adicional.
Posteriormente el psicólogo alemán William Stern utilizó el trabajo de Binet y Simon para crear la primera versión del famoso coeficiente intelectual o CI
Edad mental / Edad cronológica * 100
Un niño de 6 años con edad cronológica de 6 años, tendría un CI de 100
pero una niña de 5 años que resolviera preguntas que típicamente puede resolver un niño de 6 años tendría un CI de 120.
Esta fórmula funciona razonablemente bien con niños pero con adultos ya no. No tiene sentido intentar diferenciar estadíos de aprendizaje entre una persona de 30 de una persona de 31 años de edad, por ejemplo…
Las versiones actuales de la definición de CI lo determinan en función de un grupo de gente. Los resultados de estas evaluaciones muestran un comportamiento de una curva normal de manera que la evaluación promedio es un CI de 100 por definición y los valores hacia un extremo o el otro de la curva tienen sentido en función de la desviación estándar dentro la evaluación de ese grupo de gente. El CI no es un número absoluto como cuando dice alguien que tiene 11 años. Si alguien te dice que tiene un CI de 112 eso no significa mucho a menos que sepas qué desviación estándar mostraba el grupo contra el que se está comparando…
Y quiero aprovechar para aclarar el famoso mito de Einstein y su CI de 160, ya que para empezar este físico nunca fue evaluado, son suposiciones… y tal como acabo de decir, un número de CI sin ubicar en qué escala se encuentra, no significa gran cosa.
La escala de Binet eventualmente fue revisada para usarse tanto con niños como con adultos y se renombró como escala Standford-Binet y aún estaba pensada en la medición de la habilidad de aprendizaje… Esta escala, por ejemplo mide 5 rubros: conocimiento básico, matemáticas básicas, visualización de objetos en el espacio, memoria de trabajo y razonamiento fluido, que es la habilidad de resolver problemas nuevos.
Las evaluaciones de inteligencia más utilizadas en el mundo actual son la escala de inteligencia Weschler para adultos (WAIS) y la escala de inteligencia Weschler para niños (WISC), la primera aparece en 1955 y la segunda en 1949. Ambas han tenido varias revisiones. Actualmente incluyen subtests que evalúan similitudes entre objetos y conceptos, patrones, vocabulario.
Este tipo de evaluaciones pretenden medir aptitudes.
Requisitos de pruebas de aptitud
Para que cualquier evaluación de aptitud sea aceptada ampliamente debe cumplir tres requisitos: validez, estandarización y confiabilidad.
Validez significa que la evaluación mide lo que se supone que debe medir. Si por ejemplo una misma persona obtiene resultados similares en el WAIS y en el Stanford-Binet, esto apunta a lo que llaman una validez de constructo… o sea que miden lo que la teoría común detrás de estas evaluaciones, dice que miden.
Estandarización tiene un sentido de comparabilidad. El que puedas resolver 20 o 30 preguntas significa muy poco hasta que lo comparas contra el desempeño de un grupo grande de personas. Antes de que se pueda usar una evaluación se debe aplicar a un grupo representativo de gente que se convierte en el estándar para que otros en el futuro tomen dicha evaluación.
Confiabilidad significa que una evaluación da resultados consistentes. Una manera de saber si una evaluación es confiable es pedirle a una persona que vuelva a hacer la evaluación tiempo después o una versión muy similar.
Hay que ser muy claros en que el CI NO mide cosas como la creatividad, habilidades sociales, el nivel de civismo o la decencia de la gente. No fue diseñado para eso.
Las pruebas de CI tampoco son perfectas. Esperamos que la ciencia y sus métodos nos ayuden a encontrar mejores formas de evaluación eventualmente.
¿Qué tanto puede cambiar el CI?
Resulta que el CI evaluado puede ser afectado por factores como la motivación. Un metaanálisis del 2011 concluye que la gente a la que se le ofrece dinero si les va bien en la evaluación de CI les va mejor que a los que no les ofrecen nada…
También se ha visto que la educación recibida y su calidad pueden tener un efecto en el valor de CI, así como la nutrición y los traumas psicológicos infantiles…
Inclusive el evaluador que aplica el test puede tener influencia… hay estudios donde lo que se hizo fue decir verbalmente que a los hombres le va mejor que a las mujeres, o a las personas de cierto origen étnico, y eso tuvo un efecto medible…
También hay estudios que apuntan a que la habilidad de aprendizaje y la medición de CI mejoran cuando la gente cree que estos factores no son fijos, sino que ellos los pueden mejorar activamente. Este efecto ha sido más claramente identificado en los sectores que típicamente son estereotipados de mala manera.
El punto más importante que quiero destacar es que el CI no te define como persona… y su medición debería usarse para identificar recursos que te puedan ayudar a desarrollarte mejor y subsanar deficiencias específicas, independientemente de en cuál extremo de la curva normal te puedas encontrar.
¿Y las inteligencias múltiples?
Howard Gardner introduce esta idea en 1983, dice que en realidad hay 7 inteligencias: lingüística, musical, lógico-matemática, espacial, kinestésica, intrapersonal e interpersonal. En 1999 modificó su modelo para decir que las intra e interpersonal eran una misma wo-wo.. comenta si entendiste el chiste, agregó la inteligencia naturalista y propuso la inteligencia existencial. En el 2004 propuso otras dos… la inteligencia láser y la lámpara de mano mental.
Sin embargo, en una entrevista en 1997, Gardner comenta que él está en desacuerdo con la idea de crear 7 u 8 evaluaciones para medir las fortalezas de los niños en sus respectivas inteligencias. Dijo que esto sería “una perversión de la teoría. Es una manera de recrear el pecado del coeficiente intelectual y multiplicarlo por un mayor número”.
Entre las cosas que se critican de las inteligencias múltiples está el hecho de que Gardner no define ninguna manera de medirlas.
Pero ¿recuerdas que al inicio del video te hablé del factor g? Gardner dice en 1999 que las inteligencias múltiples son incompatibles con la idea del factor g y al mismo tiempo ubica lo que llama la Agencia central de inteligencias en el lóbulo fontral.
Por su parte, las evaluaciones de CI modernas son compatibles cuantitativamente con la idea del factor g de una única inteligencia, porque sus valores correlacionan. Además la neurociencia ha medido la actividad del lóbulo frontal del cerebro y se ha encontrado que correlaciona con las mediciones de CI. La neurociencia también ha identificado zonas comunes para distintas habilidades cognitivas que significa que físicamente se traslapan las funciones de la música, el lenguaje, el razonamiento lógico…. También hay estudios que correlacionan el CI medido con la escala Weschler y la velocidad de reacción física a un estímulo, lo que indica que la actividad física sí tiene alguna relación con la inteligencia como se mide por las evaluaciones que tenemos de CI.
Resultla también que aunque Gardner no haya “avalado” alguna manera de evaluar las inteligencias múltiples, algunos investigadores como Visser y sus colaboradores han desarrollado juegos de tests pensados para este fin y para evaluar si estas otras inteligencias podrían correlacionar o no con el factor g. Gardner ha desacreditado las evaluaciones porque dice que en todas hay un componente verbal y quizás ahí se “falsea el resultado”. Con esto en mente, las evaluaciones de Visser son no verbales y orientadas a inteligencias no lingüísticas. Para no hacerles la historia muy larga, sí hubo una correlación de varias inteligencias descritas por Gardner con el factor g, con excepción de la musical y la kinestésica.
En otras palabras, aunque puede haber otras inteligencias que no se están evaluando con las evaluaciones de CI, la mayoría de las de Gardner NO SON independientes de un solo tipo de inteligencia como él sugería.
En el 2016, para el libro Científicos marcando la diferencia: cien científicos hablan sobre sus más importantes contribuciones.
Howard Gardner comenta:
“Llamé las categorías inteligencias y no talentos. Al hacerlo estaba desafiando a los psicólogos que creían que eran dueños de la palabra inteligencia y tenían un monopolio en su definición y medida. Si hubiera escrito sobre talentos humanos en lugar de “inteligencias”, probablemente no se me habría pedido por ejemplo, contribuir a este volumen”.
Un poco más adelante, en el mismo texto, Gardner aclara:
“Admito fácilmente que mi teoría ya no es actual. Varios campos del conocimiento han avanzado significativamente desde principios de la década de 1980. Se requeriría un análisis similar al que mis colegas y yo llevamos a cabo hace 35 años, que puede o no que haga. Animo a otros a que lo lleven a cabo”
Quiero enfatizar dos cosas: la primera es que aunque la gente usa habitualmente la palabra teoría como sinónimo de idea u ocurrencia, ese no es el sentido en la ciencia. En ciencia, una idea primero es una hipótesis y puedes encontrar evidencia que la apoye o la refute. Cuando tienes mucho sustento, pruebas, evidencias obtenidas desde un punto de vista de la metodología científica entonces la hipótesis puede llegar a llamarse teoría. Con las inteligencias múltiples de Gardner no sucede esto y por eso te di algunos ejemplos de ello. Y la segunda, que Gardner les llamó “inteligencias” y no “talentos” porque según sus propias palabras, “estaba desafiando a los psicólogos”…
Finalmente quiero aclarar que esto no significa que yo crea que el CI sea lo único que podamos llegar a medir… o que no haya espacio para mejorar lo que creemos saber sobre la inteligencia. Por cuestiones evidentes de tiempo ni siquiera ahondé en el tema de la creatividad o la también famosa inteligencia emocional. Al final, en la ciencia todo está sujeto a ser medido, corregido y mejorado.
Gardner y las inteligencias múltiples también se asocia con los estilos de aprendizaje, tema que abordamos previamente en este blog.
Referencias
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Charles Spearman; De Eugène Pirou – Bibliothèque nationale de France, Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=21429621Alfred Binet. Photogravure by Synnberg Photo-gravure Co., 18, https://wellcomeimages.org/indexplus/obf_images/d4/74/0a112d102e02e226dc8f83da1fe6.jpg
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