MUJERES y NIÑAS en la CIENCIA: WE CAN DO IT!

En dos salas de emergencia distintas entran un hombre y una mujer

El hombre muestra los siguientes síntomas: 

Dificultad para respirar, fatiga, dolor en el pecho.

La mujer muestra los siguientes síntomas:

Dificultad para respirar, dolor en cuello y hombro, náuseas, sudoración excesiva, reflujo.

Al atender al hombre, se le receta rápidamente nitroglicerina, se solicita consulta con cardiólogo y se le deriva a dicha área. Al atender a la mujer, se sospecha de Reflujo Gastroesofágico, se le prescriben medicamentos para esa afección y se manda a su casa.

Ambos, hombre y mujer, sufrían de un problema cardíaco… el hombre sobrevive al episodio… la mujer, no.

Aunque hay estudios que muestran que la enorme mayoría de los casos de ataque al corazón tanto en hombre como en mujeres incluyen como síntoma principal el dolor de pecho, también hay casos en el síntoma principal no es ese y el diagnóstico puede ser errado.

Existen investigaciones que ponen en evidencia que entre hombres y mujeres sufren la misma enfermedad cardiovascular, culminan con resultados distintos. Una de las razones POSIBLES es que cada vez hay más evidencias de que las hormonas sexuales actúan de forma diferente en las células cardiovasculares de hombres y mujeres, pero hasta hace relativamente poco tiempo, esto no se había considerado.

En las mujeres con enfermedades cardiovasculares parece haber mayor prevalencia de ansiedad  y una peor comunicación y atención con sus médicos. Además todavía en la actualidad es una realidad que en el desarrollo de los fármacos ha habido menor representación en los ensayos clínicos de mujeres, por lo que tanto la efectividad como los efectos secundarios son menos conocidos. 

Los factores socioculturales, como el bajo nivel socioeconómico, la educación formal limitada, los niveles de estrés, los escasos conocimientos generales relacionados con la salud y el acceso limitado a una asistencia sanitaria de calidad influyen en los posibles resultados que pueda tener una persona con alguna enfermedad cardiovascular. Varios de estos factores son más frecuentes en mujeres que en hombres en muchos países del mundo.

Un análisis nacional suizo publicado en el 2021, que incluyó a 450 000 pacientes con enfermedades cardiovasculares mostró que las mujeres tenían menos probabilidades de ser ingresadas en una unidad de cuidados intensivos que los varones de su misma edad, a pesar de que las mujeres en cuestión padecían una enfermedad similar o más grave que los hombres. 

El hecho de que te atienda un médica o médico también parece influir en el resultado de una enfermedad de este tipo. En un estudio realizado en Estados Unidos basado en el censo de pacientes cardiacos en el estado de Florida entre 1991 y 2010, encontró que las pacientes mujeres con infarto de miocardio tratadas por una médica sobrevivieron más que las tratadas por un médico.

Sin embargo, si los médicos varones tenían más colegas mujeres en sus departamentos, su rendimiento con pacientes femeninas mejoraba.

Un amplio estudio poblacional realizado en Ontario, Canadá, publicado en 2022 coincide en el hallazgo. En este caso, las pacientes tratadas por cirujanos varones sufrieron resultados adversos con más frecuencia que las tratadas por mujeres. Las diferencias fueron más pronunciadas en cirugía cardiovascular. 

Aparentemente, el liderazgo y un cuerpo cirujano predominantemente masculinos en cardiología podrían representar una desventaja para las pacientes femeninas. En los pacientes varones no se observaron diferencias de este tipo al ser tratados por mujeres. 

Medicina de género

El término «medicina de género» se introdujo por primera vez a finales de los noventas. La medicina de género es el estudio de cómo las enfermedades difieren entre hombres y mujeres en términos de prevención, manifestación clínica, enfoques diagnósticos, terapéuticos, pronóstico, efectos psicosociales e interacciones con el sistema sanitario. La Organización Mundial de la Salud define la medicina de género como el estudio de cómo las diferencias biológicas… o socioeconómicas y culturales influyen en la salud de un individuo. 

Un mejor conocimiento de estos factores ayudará a optimizar los tratamientos para todos los pacientes.

Hay artículos como este que ilustran diversos esfuerzos en los últimos años para que las mujeres sean efectivamente representadas en ensayos clínicos del área médica.

Hay un reporte de 2010 que identifica que ha habido avances importantes en el tratamiento para mujeres de depresión, SIDA u osteoporosis, pero al mismo tiempo dicho reporte identifica que ha habido poco avance en investigación orientada a condiciones como embarazo no deseado, morbilidad maternal, enfermedades autoinmunes, desórdenes ginecológicos. 

Asimismo se enfatiza «una aplicación inadecuada de los requisitos que exigen la inclusión de un número representativo de mujeres en los ensayos clínicos», así como una comunicación inadecuada de los resultados que afectan a las mujeres, lo que eventualmente tiene efectos en la práctica clínica y la salud femenina.

Estos datos, las conclusiones de estos reportes, entre otros tantos del tipo… ilustran la importancia de incorporar a más mujeres en áreas de ciencia y de su aplicación, como lo es la medicina.

Podemos encontrar artículos que hablan de diagnósticos tardíos en el caso de mujeres en otras áreas también… es el caso por ejemplo del trastorno por déficit de atención e hiperactividad.

Diagnóstico en niñas de TDAH

Las niñas diagnosticadas con TDAH muestran menos síntomas hiperactivos/impulsivos y más síntomas de falta de atención en comparación con los niños que padecen el trastorno. Es más usual que las niñas parezcan distraídas y que sus síntomas se internalicen por ejemplo a través de sufrir ansiedad. Mientras que los niños suelan externalizar más esta condición, por ejemplo manifestando trastorno de conducta, trastorno negativista desafiante, agresión, mayor incumplimiento de reglas que los niños con desarrollo típico. En pocas palabras los niños suelen ser más disruptivos en el aula y por otro lado, se ha identificado que las niñas con TDAH pueden desarrollar mejores estrategias para compensar sus dificultades, por ejemplo, pueden esforzarse más para mantener el rendimiento en clase y “no dar problemas”

En el caso de los infantes, evidentemente dependen por completo de que un adulto identifique su sintomatología y los derive adecuadamente para recibir atención. Es posible que haya alternativas más objetivas para poder identificar adecuadamente tanto a niños como niñas, como la Prueba de Rendimiento Continuo… aunque también aquí, parece que al menos parte de la investigación que existe para tipificar adecuadamente a los infantes con el transtorno ha tomado muestras mucho menores de femeninas que de masculinos..

Mujeres en el transtorno del espectro autista

Hay literatura que ilustra que también ocurre un diagnóstico tardío en mujeres con trastornos del espectro autista que se caracteriza por dificultades en reciprocidad, comunicación social, flexibilidad y procesamiento sensorial.

Las personas con trastornos del espectro autista corren el riesgo de sufrir una serie de dificultades emocionales, conductuales, sociales, ocupacionales y económicas. La identificación oportuna puede mitigar algunos de estos riesgos y mejorar la calidad de vida, por ejemplo ayudando a la persona a identificar necesidades e intervenciones apropiadas, facilitando que otras personas les juzguen menos y también a sus padres lo que en consecuencia puede reducir la autocrítica y fomentar un sentido positivo de identidad.

También en este caso, sucede que los niños externalizan más conductas disruptivas en sus espacios mientras que las niñas desarrollan ansiedad, depresión, desórdenes alimenticios y otras dificultades que internalizan, además las niñas muestran menos conductas repetitivas y comportamientos estereotípicos.

Algunas de las sugerencias para contrarrestar este problema incluyen:

En primer lugar, las investigaciones que buscan definir la expresión visible del espectro autista femenino debe incluir las acciones de tipo camuflaje, que las niñas desarrollan.

En segundo lugar, debe identificarse el nivel de conocimiento del tema de los profesionales del área de salud y educativa, a fin de desarrollar programas de formación que faciliten que ellos puedan identificar y derivar más rápidamente a las niñas en el espectro

Finalmente, hay literatura que sugiere que para las mujeres en el espectro autista hay mayor riesgo de sufrir abusos de caracter sexual. Es importante que este tema se investigue a fin de que puedan desarrollarse programas que les ayuden a mantenerse seguras.

Estos son solo algunos ejemplos de porqué necesitamos que más mujeres se incorporen a diversas áreas de desarrollo y aplicación científica… y por qué es importante que las investigaciones diversas incluyan muestras suficientes de diversas poblaciones.

Por eso, es que el 11 de febrero es el día internacional de la mujer y la niña en la ciencia, declarado así por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas.

Referencias

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